...Fuí a los bosques porque quería vivir a conciencia. Quería vivir a fondo y extraer todo el meollo a la vida.
Olvidar todo lo que no fuera la vida, para no llegar a la muerte, descubriendo que no había vivido...
Cuando yo era chico me encantaban los circos, y lo que más me gustaba de los circos eran los animales. También a mí como a otros, después me enteré, me llamaba la atención el elefante. Durante la función, la enorme bestia hacía despliegue de su peso, tamaño y fuerza descomunal... pero después de su actuación y hasta un rato antes de volver al escenario, el elefante quedaba sujeto solamente por una cadena que aprisionaba una de sus patas a una pequeña estaca clavada en el suelo.
Sin embargo, la estaca era sólo un minúsculo pedazo de madera apenas enterrado unos centímetros en la tierra. Y aunque la cadena era gruesa y poderosa me parecía obvio que ese animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su propia fuerza, podría, con facilidad, arrancar la estaca y huir.
Sin embargo, la estaca era sólo un minúsculo pedazo de madera apenas enterrado unos centímetros en la tierra. Y aunque la cadena era gruesa y poderosa me parecía obvio que ese animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su propia fuerza, podría, con facilidad, arrancar la estaca y huir.
El misterio es evidente:
¿Qué lo mantiene entonces?
¿Por qué no huye?
Cuando tenía cinco o seis años, yo todavía confiaba en la sabiduría de los grandes. Pregunté entonces a algún maestro, a algún padre, o a algún tío por el misterio del elefante. Alguno de ellos me explicó que el elefante no se escapa porque estaba amaestrado.Hice entonces la pregunta obvia:
- Si está amaestrado ¿por qué lo encadenan?
No recuerdo haber recibido ninguna respuesta coherente.
Con el tiempo me olvidé del misterio del elefante y la estaca... y sólo lo recordaba cuando me encontraba con otros que también se habían hecho la misma pregunta.Hace algunos años descubrí que por suerte para mí alguien había sido lo bastante sabio como para encontrar la respuesta: El elefante del circo no escapa porque ha estado atado a una estaca parecida desde que era muy, muy pequeño.
Cerré los ojos y me imaginé al pequeño recién nacido sujeto a la estaca.Estoy seguro de que en aquel momento el elefantito empujó, tiró y sudó tratando de soltarse. Y a pesar de todo su esfuerzo no pudo. La estaca era ciertamente muy fuerte para él. Juraría que se durmió agotado y que al día siguiente volvió a probar, y también al otro y al que le seguía... Hasta que un día, un terrible día para su historia, el animal aceptó su impotencia y se resignó a sus destino.
Este elefante enorme y poderoso, que vemos en el circo, no escapa porque cree (pobre) que NO PUEDE.
El tiene registro y recuerdo de su impotencia, de aquella impotencia que sintió poco después de nacer. Y lo peor es que jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese registro.Jamás... jamás... intentó poner a prueba su fuerza otra vez...
Vamos por el mundo atados a cientos de estacas que nos restan libertad... condicionados por el recuerdo de "no puedo"...
Vamos por el mundo atados a cientos de estacas que nos restan libertad... condicionados por el recuerdo de "no puedo"...
Tu única manera de saber, es intentar de nuevo poniendo en el intento todo tu corazón...
(del maestro J. Bucay)
[...gracias Pepa por haberme hecho este regalo en su día y que, hoy, no sé muy bien por qué, lo he vuelto a leer y me ha apetecido colgarlo aquí... Gracias]
VERDE: es el color de la primavera, del renacer, de la buena suerte y la esperanza...para los días alegres y llenos de risas...para la frescura, naturalidad y espontaneidad...para los besos robados... Es el color de mi tierra...de las botellas de sidra...el de los ojos que llenan de vida los míos... De verde están pintadas las puertas que se abren y las promesas que se cumplen...mi juventud y las primeras borracheras...todo aquello que fui algún día y aún sigo conservando en algún recóndito lugar...
NARANJA: es para los días tontos y de perreo... para apurar tardes de verano en una terraza... es el color de una puesta de sol sobre el Ponte Vecchio de Florencia...de mis "déjà vu"...de los sentimientos que afloran pero no quieren asomarse... se tiñen así las sonrisas y los estados de humor forzados...mi ciclotimia...las cosas que empiezan mal pero acaban bien...de naranja es el sabor de los besos al amanecer...
AMARILLO: es para los días impares...para los días cojos y agridulces...para los fracasos y las decepciones...para los quiero y no puedo...para las llamadas sin respuesta...para el sabor amargo de la derrota en los labios...para la mala suerte...
ROJO: es el color de la lucha, de las batallas cotidianas, de la rebelión y, cómo no, de la Revolución...es un color para quemar naves y salir corriendo con el corazón en la boca sin mirar atrás...Rojo es mi corazón zurdo...mi Che Guevara, mi Pasionaria...Rojo y sublevado es el pueblo con el que sueño y por el que lucho...y en rojo quiero ver el futuro... Rojo sobre negro...Roja y sangrante es mi inevitable visceralidad, mi pasión y mi llanto...roja mi cólera y mi ira...mi derecho al pataleo...mi vergüenza...Rojos se quedan mis ojos de apretarlos cuando te vas y los cierro para retenerte en mis retinas...rojo es mi desasosiego y mis ardores cuando necesito que estés más cerca...y en efervescencia roja me consumo cuando te echo de menos y la distancia escuece...
BLANCO: es para los días vacíos...para la pasividad...para el inicio tras el borrón y cuenta nueva...de blanco pinto el mundo cuando no quiero pensar y necesito evadirme...de blanco virginal me coso alas y revoloteo cuando no entiendo nada y me siento ajena a todo...blanca era mi inocencia antes de caer corrompida en esta sociedad...blancos son mis miedos tontos y la poca ingenuidad que me queda...blanca la luz que te rodea cuando vienes a rescatarme del tedio en sueños...blanca y transparente fui algún día, hace mucho tiempo, cuando pensaba que los sueños se cogían con las manos...
NEGRO: para los días parchosos...así son las aguas de los mares en los que naufrago y toco fondo...para la soledad y el desamparo emocional...para las preguntas sin respuesta y las respuestas sin pregunta...de negro viste la dama que se lleva a las personas queridas...Negro es el carbón de mi tierra que, de negro y con silicosis, tiñe y enferma los pulmones de mis paisanos mineros...negros son los fondos de algunos vasos de ginebra...negros imagino los días en los que me faltes...
AZUL: en una caja azul guardo los mejores momentos de mi vida...azul es el cielo por el que vuelan mis sueños y los mares que acuchillo cargada de energía, partiendo las olas con mi casco de proa...Azules los sueños de estribor que me cuentas, y más azules aún los que te callas...es para los días que me levanto con fuerzas renovadas y con ganas de comerme el mundo...cuando vuelo por encima de todo y de todos...cuando recuerdo que soy libre y siento realmente esa libertad...es para los besos de buenos días en la frente...para las miradas cómplices...para cuando me creo que existe "otro mundo posible"...en azul siento cuando todo marcha bien, cuando todo tiene sentido, negándome a creer que existan piedras en las que tropezarse...Azules los futuros inciertos que por la noche te roban el sueño y por el día te hacen soñar despierta... Azules las calles de Chueca...azules la sidra y el rebujito...azules mis niñas... Azul tú, que estás hecha de mar y de poniente...Azul es mi vida cuando te tengo delante... Azul...siempre azul... en todas sus tonalidades...
NARANJA: es para los días tontos y de perreo... para apurar tardes de verano en una terraza... es el color de una puesta de sol sobre el Ponte Vecchio de Florencia...de mis "déjà vu"...de los sentimientos que afloran pero no quieren asomarse... se tiñen así las sonrisas y los estados de humor forzados...mi ciclotimia...las cosas que empiezan mal pero acaban bien...de naranja es el sabor de los besos al amanecer...
AMARILLO: es para los días impares...para los días cojos y agridulces...para los fracasos y las decepciones...para los quiero y no puedo...para las llamadas sin respuesta...para el sabor amargo de la derrota en los labios...para la mala suerte...
ROJO: es el color de la lucha, de las batallas cotidianas, de la rebelión y, cómo no, de la Revolución...es un color para quemar naves y salir corriendo con el corazón en la boca sin mirar atrás...Rojo es mi corazón zurdo...mi Che Guevara, mi Pasionaria...Rojo y sublevado es el pueblo con el que sueño y por el que lucho...y en rojo quiero ver el futuro... Rojo sobre negro...Roja y sangrante es mi inevitable visceralidad, mi pasión y mi llanto...roja mi cólera y mi ira...mi derecho al pataleo...mi vergüenza...Rojos se quedan mis ojos de apretarlos cuando te vas y los cierro para retenerte en mis retinas...rojo es mi desasosiego y mis ardores cuando necesito que estés más cerca...y en efervescencia roja me consumo cuando te echo de menos y la distancia escuece...
BLANCO: es para los días vacíos...para la pasividad...para el inicio tras el borrón y cuenta nueva...de blanco pinto el mundo cuando no quiero pensar y necesito evadirme...de blanco virginal me coso alas y revoloteo cuando no entiendo nada y me siento ajena a todo...blanca era mi inocencia antes de caer corrompida en esta sociedad...blancos son mis miedos tontos y la poca ingenuidad que me queda...blanca la luz que te rodea cuando vienes a rescatarme del tedio en sueños...blanca y transparente fui algún día, hace mucho tiempo, cuando pensaba que los sueños se cogían con las manos...
NEGRO: para los días parchosos...así son las aguas de los mares en los que naufrago y toco fondo...para la soledad y el desamparo emocional...para las preguntas sin respuesta y las respuestas sin pregunta...de negro viste la dama que se lleva a las personas queridas...Negro es el carbón de mi tierra que, de negro y con silicosis, tiñe y enferma los pulmones de mis paisanos mineros...negros son los fondos de algunos vasos de ginebra...negros imagino los días en los que me faltes...
AZUL: en una caja azul guardo los mejores momentos de mi vida...azul es el cielo por el que vuelan mis sueños y los mares que acuchillo cargada de energía, partiendo las olas con mi casco de proa...Azules los sueños de estribor que me cuentas, y más azules aún los que te callas...es para los días que me levanto con fuerzas renovadas y con ganas de comerme el mundo...cuando vuelo por encima de todo y de todos...cuando recuerdo que soy libre y siento realmente esa libertad...es para los besos de buenos días en la frente...para las miradas cómplices...para cuando me creo que existe "otro mundo posible"...en azul siento cuando todo marcha bien, cuando todo tiene sentido, negándome a creer que existan piedras en las que tropezarse...Azules los futuros inciertos que por la noche te roban el sueño y por el día te hacen soñar despierta... Azules las calles de Chueca...azules la sidra y el rebujito...azules mis niñas... Azul tú, que estás hecha de mar y de poniente...Azul es mi vida cuando te tengo delante... Azul...siempre azul... en todas sus tonalidades...
[tienes razón, el Negro es un color egoísta, porque se queda con todos y no devuelve ninguno]
Quien bien me conoce, sabe que jamás en la vida llevo (ni llevaré) encima joya alguna, ni nada que se le asemeje y represente ostentosidad...Sin embargo, el pasado día 20 de septiembre, salí a la calle para comprarme, única y exclusivamente, una joya...una piedra preciosa...un diamante en bruto...Y esto fue lo que encontré...
Y, qué quieren que les diga... me sigo quedando con las joyas que no se ven... son las mejores y las más bonitas... No las luce el cuello...ni los lóbulos de las orejas... ni las muñecas... Las luce el alma... y ahí no hay ladrón alguno que llegue a robártelas... ni que esté interesado en hacerlo, porque este tipo de joyas no tienen oro, ni diamantes, ni gemas preciosas... nada que enseñe y demuestre tu capacidad económica adquisitiva... nada que te haga ser más que los demás...
[Ya lo decía Silvio..."las joyas no tenían alma, sólo eran espejos, colores, brillantes"...]
Y, qué quieren que les diga... me sigo quedando con las joyas que no se ven... son las mejores y las más bonitas... No las luce el cuello...ni los lóbulos de las orejas... ni las muñecas... Las luce el alma... y ahí no hay ladrón alguno que llegue a robártelas... ni que esté interesado en hacerlo, porque este tipo de joyas no tienen oro, ni diamantes, ni gemas preciosas... nada que enseñe y demuestre tu capacidad económica adquisitiva... nada que te haga ser más que los demás...
[Ya lo decía Silvio..."las joyas no tenían alma, sólo eran espejos, colores, brillantes"...]
1 - 5 - 6 - 11 - 25 - 38
Todos los jueves la misma emoción:
- De hoy no pasa...esta semana me toca fijo, no puede ser tan difícil...
Y cada sábado por la noche la misma rabia:
- Mierda, joer...ni un puñetero número...ni siquiera el reintegro...
Quiero que me toque... lo exijo!! Quiero acertar los 6 numeritos para comprar libertades...
comprar, de alguna manera, el tiempo...vivir sin prisas y a mi aire...sin calendario...sin agenda...sin despertador... Coserme alas, recorrer mundo y mezclarme y empaparme de otras gentes, colores y aromas...acercar horizontes... descubrir que más allá hay otras formas de vida y realidades...saber que el mundo es tremendamente grande a la par que pequeño...ver con mis propios ojos las maravillas que tantas veces he visto en las fotos de los libros...incluso las que no salían en ellos (seguro que son mejores aún)...contemplar los caprichos y antojos de las formas y colores de la madre naturaleza...caminar con arena en el alma por los desiertos...que los rayos del sol me cieguen los ojos en una expedición por una lengua glaciar...saberme en peligro en mitad de una selva...coronar una cima sin oxígeno en los pulmones...sumergirme en las aguas marinas y descubrir que existe otro mundo ahí abajo...sentir vértigo mientras vadeo un desfiladero... Descubrir que hay más mundo fuera de mi barrio, de mi ciudad, de mi país...y derribar fronteras... SER VERDADERAMENTE UN DIOS!!!
Entonces, cuando rompo asqueada el boleto, me consuelo pensando que todo da igual...nunca iba a estar conforme...seguro que luego se me antojaba subir a la luna o comprarme una estrella...o hacer un crucero por el arcoiris... Y, lo que aún es peor...iba a estar sola... porque nadie de mi querida gente iba a poder seguirme el ritmo...
Lo que no sé es por qué aún la sigo echando semana tras semana...quizá por asegurarme un lugar en el que dar con mis huesos cada noche y llegar a fin de mes un poco más desahogada...quizá...quién sabe...la suerte está echada...
Mientras tanto me sigo conformando con el reintegro...
Creo que se me ha colado el otoño en el cuerpo... y por más que trato de evitarlo, no puedo abrir un agujero en los bolsillos del pantalón para que escape... los problemas, las dudas y los miedos, a modo de hojas secas, se caen al suelo... trato de alzar la mirada al cielo para no verlos, pero una de las cosas que tienen las hojas secas, es que suenan bajo tus pies mientras caminas encima de ellas... y tratas de no mirar, pero suenan...y crujen... y se te mete el sonido en los oídos hasta desquiciarte... entonces te obligas a mirar abajo y ves las hojas... caducas, secas, destrozadas... y no sabes si repararlas, o simplemente esperar a que las barra el viento y las lleve lejos... a ningún lugar... a ninguna parte... y que, de paso, te lleve a ti con ellas...
...Sé bien que represento algunas veces eso que con violencia acostumbro a criticar
Que de un tiempo a esta parte mi paciencia no entiende de tu vida, que olvido mi lugar
Sé bien que a veces hablo demasiado, diciendo poco o nada, que omito a la razón
Que hace semanas yo y la poesía estamos enfrentados y no nos damos voz
Sé bien que pocas veces he sabido entenderte sin palabras, dejar de blasfemar
Que últimamente me azoro sin causa y en vez de soluciones me vuelvo un volcán...
...Pero has de saber que quiero tardar una vida entera en hacerte el amor...
[gracias por los colores...por tus colores...estoy segura que los utilizaré pronto... cuando deje de verlo todo en blanco y negro]
QUÉ HACE UN CHICO COMO TÚ EN UN SITIO COMO ÉSTE
Colgado el miércoles, septiembre 14, 2005 por Guaju.
- Aprovecha, que el lunes ya no te sirvo...
- Y eso? (cara de sorpresa) Cambias el turno?
- No... (me indica un letrero) Cerramos quince días por vacaciones...
- Ahhh (cara de alivio y risa floja) No lo había visto... Hay ganas, no?
- No te las puedes imaginar...Que te pongo, lo de siempre?
- Sí, pero cóbrame, que quiero sacar tabaco...
- Ahora, un segundo.
Me da el cambio, saco el tabaco y me voy a mi mesa. Noto que estoy sonrojada y me imagino la cara de payasa que debo estar poniendo...un desastre, la verdad... En un intento de ser amable (quizá por deformación profesional) me levanto a la barra a por el café...
- Qué quieres ahora?
- (no ponerme más roja, coño) Ehh, nada, que me des el café, que lo llevo a la mesa...Ahh, y un cenicero...(venga María, lúcete más mujer) Ya no te pido más, lo prometo...
- Podrás con todo?
- Claro...(a estas alturas ya soy un tomate con patas...grrrrr) "poderé", hombre, "poderé"...
- Venga, tira pa la mesa que te lo llevo yo todo...
- Vaya...
Camino de la mesa, no sé por qué extraña razón, me voy sintiendo gilipollas...quizá sea por la situación tan subrreal que estaba viviendo... porque no sabía qué carajo decirle... y porque pensaba las frases antes de contestar (que tiene más delito después de ver mi lucimiento)... y porque me jode demostrarme una vez que soy tremendamente tímida...
- (schh, disimula, que llega) Gracias Dani
- De nada. Pues no sabes qué ganas de coger las vacaciones... No tengo ganas de ver a nadie conocido durante los quince días...y no por nada, ojo...pero tengo ganas de desconectar un poco...
- Ya, normal... (qué le digo, qué le digo...piensa algo pero ya...joder, que no se va el tío...) Pero te quedas aquí o te vas de vacaciones?
- Me voy con Gustavo (compi de la cafetería) para el sur de Portugal... A ver si cogemos algo de sol...
- Mientras no os coja a vosotros un incendio... (toma ya, maría!! ahí sí que te has lucido!! oleeeee tus ovarios!! Sublime has estado, campeona!!)
- Calla, no me jodas... (se va hacia la barra...bien!!, puedo empezar a respirar) Además, no hay problema...ya quemó Portugal entera (o entero¿?)
- (risa floja de "por fin se va y dejo de hacer el ridi") Bueno anda, pues que te aprovechen las vacaciones...
- Eso espero...Ya te contaré...
Se mete detrás de la barra y siento el cosquilleo en las mejillas de cuando se bajan los colores...
Y ahí me quedé yo, sentada en la mesa, poniendo mi mp3 a funcionar y riéndome de mí misma y de la situación...No deja de hacerme gracia la conversación... nunca había hablado tanto conmigo, a pesar de que paro todos los días...si acaso alguna bromilla o frase suelta, pero no una conversación en toda regla... Y no sé muy bien por qué le caí en gracia al camarero buenorro éste y siempre me dice algo o se para frente a mi mesa y me llama para decirme adiós cuando acaba su turno... o sí lo sé... quizá sea porque soy la única que no lo mira con cara de lagarta... yo sólo me limito a ponerme roja cuando me habla y a sumirme de nuevo en mi mundo...
[...aquí confirmo una vez más mi teoría, por llamarla de alguna manera, sobre lo "besable"...]
- Y eso? (cara de sorpresa) Cambias el turno?
- No... (me indica un letrero) Cerramos quince días por vacaciones...
- Ahhh (cara de alivio y risa floja) No lo había visto... Hay ganas, no?
- No te las puedes imaginar...Que te pongo, lo de siempre?
- Sí, pero cóbrame, que quiero sacar tabaco...
- Ahora, un segundo.
Me da el cambio, saco el tabaco y me voy a mi mesa. Noto que estoy sonrojada y me imagino la cara de payasa que debo estar poniendo...un desastre, la verdad... En un intento de ser amable (quizá por deformación profesional) me levanto a la barra a por el café...
- Qué quieres ahora?
- (no ponerme más roja, coño) Ehh, nada, que me des el café, que lo llevo a la mesa...Ahh, y un cenicero...(venga María, lúcete más mujer) Ya no te pido más, lo prometo...
- Podrás con todo?
- Claro...(a estas alturas ya soy un tomate con patas...grrrrr) "poderé", hombre, "poderé"...
- Venga, tira pa la mesa que te lo llevo yo todo...
- Vaya...
Camino de la mesa, no sé por qué extraña razón, me voy sintiendo gilipollas...quizá sea por la situación tan subrreal que estaba viviendo... porque no sabía qué carajo decirle... y porque pensaba las frases antes de contestar (que tiene más delito después de ver mi lucimiento)... y porque me jode demostrarme una vez que soy tremendamente tímida...
- (schh, disimula, que llega) Gracias Dani
- De nada. Pues no sabes qué ganas de coger las vacaciones... No tengo ganas de ver a nadie conocido durante los quince días...y no por nada, ojo...pero tengo ganas de desconectar un poco...
- Ya, normal... (qué le digo, qué le digo...piensa algo pero ya...joder, que no se va el tío...) Pero te quedas aquí o te vas de vacaciones?
- Me voy con Gustavo (compi de la cafetería) para el sur de Portugal... A ver si cogemos algo de sol...
- Mientras no os coja a vosotros un incendio... (toma ya, maría!! ahí sí que te has lucido!! oleeeee tus ovarios!! Sublime has estado, campeona!!)
- Calla, no me jodas... (se va hacia la barra...bien!!, puedo empezar a respirar) Además, no hay problema...ya quemó Portugal entera (o entero¿?)
- (risa floja de "por fin se va y dejo de hacer el ridi") Bueno anda, pues que te aprovechen las vacaciones...
- Eso espero...Ya te contaré...
Se mete detrás de la barra y siento el cosquilleo en las mejillas de cuando se bajan los colores...
Y ahí me quedé yo, sentada en la mesa, poniendo mi mp3 a funcionar y riéndome de mí misma y de la situación...No deja de hacerme gracia la conversación... nunca había hablado tanto conmigo, a pesar de que paro todos los días...si acaso alguna bromilla o frase suelta, pero no una conversación en toda regla... Y no sé muy bien por qué le caí en gracia al camarero buenorro éste y siempre me dice algo o se para frente a mi mesa y me llama para decirme adiós cuando acaba su turno... o sí lo sé... quizá sea porque soy la única que no lo mira con cara de lagarta... yo sólo me limito a ponerme roja cuando me habla y a sumirme de nuevo en mi mundo...
[...aquí confirmo una vez más mi teoría, por llamarla de alguna manera, sobre lo "besable"...]
No me apetece nada...absolutamente nada...ni siquiera escribir aquí...Así que me dedicaré a copiar y pegar los mares por lo que esta semana llevo naufragando...perdón, quise decir navegando... Lo sé, puede resultar un coñazo, pero no tengo nada qué contar... Perdón por la tristeza...
Un par de alas
¿Cuándo se ha marchado
la sonrisa de tu boca,
cuándo ha emigrado a otro país?
¿Cuándo fue el momento
en que se hizo insoportable
bajo el mismo techo convivir?
Si tu único pecado ha sido amarme
y mi único delito fue morir por ti.
Dime amor
por qué esta carcel tiene abiertas las ventanas
y sólo hay un par de alas para compartir los dos.
Y si vuelas tú, aquí quedo yo,
y si vuelo yo aquí te quedas tú.
Y te pido amor, y te ruego amor...
que vueles y regreses cuando el viento y tú seáis uno
y me enseñes a volar.
Y si amas más el vuelo,
quédate en el cielo que ya aprenderé a volar.
Quedan aquí un par de cosas tuyas,
unas fotos y un vestido
que no sé dónde esconder.
Queda tu perfume en mi almohada,
sigue vivo tu fantasma
y no se a dónde correr.
Y no sé si estoy despierto,
y no sé si estoy dormido,
sólo sé que sigo vivo por si piensas en volver.
Y sólo quiero abrazarte
y sólo quiero besarte
Y empaparte de preguntas sin pronunciar un "porqué".
Y te pido amor, y te ruego amor...
que vueles y regreses cuando el viento y tú seáis uno
y me enseñes a volar.
Y si amas más el vuelo,
quédate en el cielo que yo aprenderé a volar.
(Fran Reca)
Tus manos, tu forma de andar, tus pasos tan lejos de mí,
Tus ojos, volverte a mirar, tenerte, volverte a tocar,
Seguirte, no comprenderán, qué importa, ya se olvidarán
Y quiero tenerte otra vez en mis brazos
No debería nadie en la vida
No debería hablar yo de esto
Yo enciendo velas y quemo inciensos
Quiero empezar una nueva partida
Alicia, escribo desesperado, soy solo un as amargado enamorado de ti.
Alicia, sin que me vea la reina, por ti he cortado esta rosa que estaba aún sin pintar
El plano de todo este laberinto que construi con mis manos para poderte tener
Alicia, esta condena de muerte no lleva adonde quería, no lleva a ningún lugar
Alicia, sé que te amado cruelmente y que es poco inteligente obligar a alguien a amar.
Alicia, sé que te amado realmente, que puede sobre la mente el corazón dominar.
Alicia, sólo quiero que perdones mi errores a montones y que te olvides de mí.
Alicia, ahora regresa a tu mundo que ya bastante fue el tiempo que te retuve yo aquí.
Recuerda que un laberinto de rosas puede que sea tu celda y no un hermoso jardín.
Si a tus ojos soy vela, antes luz de escenario.
Si ya no sé quien era, si de mí sólo queda
Y ahora que ando perdido del sueño desvelado;
Dónde puedo encontrarte, donde puedo aún hallarte, donde no te has marchado.
Quizás soy un enfermo corazón contagiado
Sólo quiero aun decirte:sólo tengo una cura,
Si mis labios te cantan y mis manos te anhelan.
Yo quizás fui cometa de mi rumbo alejado
Y ahora busco sentido al infierno pasado
Si no puedo tenerte tendré que convencerme
Soy, de tus ojos la mirada fiel
Soy, el guardian de tu timidez
Soy como el mar que se retira después de borrar tus huellas
Soy mariposa que quiere volar
Soy, lo que tú quieras que sea, soy
Di que deslizarás tus dedos sobre mí,
Di que harás de mi desnudez tu abrigo,
Y náufrago entre mis muslos,
Ven y deshazte sobre mí,
Dale la vuelta a esa tibia manta,
Que tengo sed, tengo sed de tu saliva,
...la que riega mi sequia,
Ven y deshazte sobre mí,
Y si prometo que te volveré a soplar,
Y si me atrevo a suplicarte que me muerdas,
Haré de tu guerra mi cruzada,
Un par de alas
¿Cuándo se ha marchado
la sonrisa de tu boca,
cuándo ha emigrado a otro país?
¿Cuándo fue el momento
en que se hizo insoportable
bajo el mismo techo convivir?
Si tu único pecado ha sido amarme
y mi único delito fue morir por ti.
Dime amor
por qué esta carcel tiene abiertas las ventanas
y sólo hay un par de alas para compartir los dos.
Y si vuelas tú, aquí quedo yo,
y si vuelo yo aquí te quedas tú.
Y te pido amor, y te ruego amor...
que vueles y regreses cuando el viento y tú seáis uno
y me enseñes a volar.
Y si amas más el vuelo,
quédate en el cielo que ya aprenderé a volar.
Quedan aquí un par de cosas tuyas,
unas fotos y un vestido
que no sé dónde esconder.
Queda tu perfume en mi almohada,
sigue vivo tu fantasma
y no se a dónde correr.
Y no sé si estoy despierto,
y no sé si estoy dormido,
sólo sé que sigo vivo por si piensas en volver.
Y sólo quiero abrazarte
y sólo quiero besarte
Y empaparte de preguntas sin pronunciar un "porqué".
Y te pido amor, y te ruego amor...
que vueles y regreses cuando el viento y tú seáis uno
y me enseñes a volar.
Y si amas más el vuelo,
quédate en el cielo que yo aprenderé a volar.
(Fran Reca)
Sentir que te tengo
Tus manos, tu forma de andar, tus pasos tan lejos de mí,
tus miedos a ningún lugar, nos vemos...
Tus ojos, volverte a mirar, tenerte, volverte a tocar,
Tu barco dispuesto a zarpar, nos vemos...
Y quiero tenerte otra vez en mis brazos
y al darme la vuelta encontrarme tus labios
Que quiero quedarme en tu pelo enredado,
atarme a tu cuerpo, quedarme a tu lado.
¿qué quiero? te quiero, te quiero.
Seguirte, no comprenderán, qué importa, ya se olvidarán
extraños, ya le explicarán los años
Tu piensas que te olvidaré que al tiempo ya no pensaré
me engaño te recordaré mil años
No quiero volver a sentir que me he muerto,
halla la esperanza, soñarte despierto,
que quiero pedir otra carta a la vida,
aportarlo todo, abrir mis heridas,
¿qué quiero? te quiero, te quiero.
Y quiero tenerte otra vez en mis brazos
y al darme la vuelta encontrarme tus labios
Que quiero quedarme en tu pelo enredado,
atarme a tu cuerpo, quedarme a tu lado.
¿qué quiero? te quiero, te quiero.
(Fran Reca)
A tu manera
No debería nadie en la vida
volver a casa y hallarse solo,
que no halla un alma que la reciba
venir de lejos y hundirse en el lodo
de hallar tristezas por bienvenidas,
no oir un te quiero, hola tesoro.
No debería hablar yo de esto
que he prometido dejar el tema
pero tu alma me tiene en arresto
el corazón en lista de espera
de darme un beso en luna llena
no poner nombres, que son barreras,
sé que me quieres a tu manera.
Yo enciendo velas y quemo inciensos
pongo tus fotos por todos lados,
quiero perderme en tus ojos inmensos
quiero quedar de tu cuerpo empapado
quiero librarme de mi pasado,
en ti cobijarme acurrucado
Quiero empezar una nueva partida
no usar el alma de papelera
que sea tu pecho meta y salida
recorrer juntos la carretera
ser de este viaje mi compañera
sé que me quieres a tu manera
(Fran Reca)
Alicia
Alicia, escribo desesperado, soy solo un as amargado enamorado de ti.
Alicia, nada me impide escribirte, salvo perder la cabeza, y ya perdí el corazón.
Alicia, sin que me vea la reina, por ti he cortado esta rosa que estaba aún sin pintar
Alicia, solo siendo el jardinero muy poco puedo entregarte, solo una cosa quizás
El plano de todo este laberinto que construi con mis manos para poderte tener
Alicia, esta condena de muerte no lleva adonde quería, no lleva a ningún lugar
Alicia, no me queda más remedio que ahora quitarme de en medio y que dejarte escapar
Alicia, sé que te amado cruelmente y que es poco inteligente obligar a alguien a amar.
Alicia, sólo voy a suplicarte un beso antes de marcharte que marque el punto y final.
Alicia, sé que te amado realmente, que puede sobre la mente el corazón dominar.
Alicia, si cometemos locuras es porque estamos a oscuras, porque no vemos la luz.
Alicia, sólo quiero que perdones mi errores a montones y que te olvides de mí.
Alicia, sé que detrás de tu espejo existe un mundo de ensueño donde podrás ser feliz.
Alicia, ahora regresa a tu mundo que ya bastante fue el tiempo que te retuve yo aquí.
Y vuela, solo te pido que vueles, que vuelvas a ser tan libre como lo fuiste sin mí.
Recuerda que un laberinto de rosas puede que sea tu celda y no un hermoso jardín.
Recuerda que nadie puede obligarte ni tu corazón robarte si tú no lo has de elegir.
(Fran Reca)
Luz de escenario
Si a tus ojos soy vela, antes luz de escenario.
Si tus ojos me ciegan, si aún me queman tus labios.
Si ya no sé quien era, si de mí sólo queda
el que suena en tu radio.
Y ahora que ando perdido del sueño desvelado;
ahora soy basurero que rebusca el pasado.
Dónde puedo encontrarte, donde puedo aún hallarte, donde no te has marchado.
Quizás soy un enfermo corazón contagiado
que enfermé por desearte, por no poder tenerte,
por amar demasiado
Por entregar el alma del paraiso expulsado
Por entregar el alma del paraiso expulsado
por no poder seguirte y al final rendirme
a soñarte a mi lado
Sólo quiero aun decirte:sólo tengo una cura,
sólo salvan tus besos, sólo salvan tus labios.
Si mis labios te cantan y mis manos te anhelan.
Si te me haces lejana como la luna llena.
Yo quizás fui cometa de mi rumbo alejado
al cruzar por tu estela.
Y ahora busco sentido al infierno pasado
ahora que me he prohibido recordarte a diario.
Si no puedo tenerte tendré que convencerme
que mi luz se ha apagado.
(Fran Reca)
Soy
Soy, de tus ojos la mirada fiel
De tu cuerpo un poro de tu piel
De tu mente un ser incandescente,
Del calendario una semana ausente
Soy, el guardian de tu timidez
El ladrón de lo que pudo ser,
De tu pecho un corazón latente
De tus labios un necesito verte
Soy como el mar que se retira después de borrar tus huellas
Como el sol que reaparece cuando huyen las estrellas
Soy, lo que queda de ti, soy lo que queda de mí.
Soy de una frase sólo el verbo amar
De un recuerdo solo el olvidar
De la música una canción pendiente
De tus sueños un nada es para siempre.
Soy mariposa que quiere volar
A tu lado siempre despertar
Aprender el vuelo mágico del beso;
encontrarnos juntos en otro unvierso.
Soy, lo que tú quieras que sea, soy
Pero tengo sólo lo que doy
Que la vida es algo aún modificable
Pero con amor y nunca con el sable.
(Fran Reca)
Deshazte sobre mí
Di que deslizarás tus dedos sobre mí,
que te quedas en mis pechos a dormir,
que me vaciarás por dentro.
Di que harás de mi desnudez tu abrigo,
que te atarás a mi ombligo,
para abrevar en mi piel.
Y náufrago entre mis muslos,
dirás que no hay otro mundo,
donde te quieras perder.
Ven y deshazte sobre mí,
destruyámonos los dos,
y hazme luego renacer,
empapada en tu sudor.
Dale la vuelta a esa tibia manta,
deslízate por mi espalda
y no me dejes vencer.
Que tengo sed, tengo sed de tu saliva,
que es la savia que da vida,
la que me llena de fe...
...la que riega mi sequia,
la que inunda de alegría
los resquicios de mi ser.
Ven y deshazte sobre mí,
destruyámonos los dos,
y hazme luego renacer,
empapada en tu sudor.
Y si prometo que te volveré a soplar,
que te llevo al sacromonte a levitar,
y a esconderte entre mi pelo.
Y si me atrevo a suplicarte que me muerdas,
di que tu también recuerdas el incendio de mi voz,
cuando sobre mis caderas, recorríamos praderas y me asfixiaba tu olor.
Haré de tu guerra mi cruzada,
me convertiré en tu esclava,
me dejaré conquistar.
Te pediré que te quedes a mi lado,
y abrazado a mi costado, no me dejes respirar
(Elena Bugedo)
Y muchas...muchas más canciones...pero ni ganas tengo de seguir copiando y pegando...
Creo que el otoño ya entró en mi cuerpo...
MADRE, TOCAN A MUERTO
No puedo dormir, madre, porque esta noche tocan a muerto… porque llega la hora de volver a llorar por alguien de los nuestros.
La negra dama vuelve, como siempre, en silencio…sumida entre las sombras, escondida en negros velos… vuelve para darnos una lección de humildad y hacernos tragar nuestra soberbia, recordándonos así su poder y la grandeza de su reino.
Afloran ahora, madre, mis sentimientos, con la complicidad de la noche… y mientras busco razones que me convenzan, se evade mi pensamiento a buscar su blanco pelo… su castigado cuerpo… sus ojos que son culpables de querer seguir viviendo. Y es ahora cuando pienso: a qué le temen los presos horas antes de que suenen los tambores en el pueblo, si saben que su partida ya es un hecho sin remedio?
Se lo lleva la muerte, quizá porque no siga sufriendo…por no verlo de puerta en puerta tras de cariño, como los perros…Y es que bien sabes, madre, que no hay culpables, sólo silencio… cuando la muerte llega tan sólo pide tener respeto.
¿No te das cuenta, madre, de que esta noche tocan a muerto?
Ahora es cuando me pesa el haber perdido el tiempo…el no haber sido yo misma…el escudarme en los miedos y dejar que, poco a poco, se escapara el tren que quiero…
La noche, siempre propicia para abrir el baúl de los sentimientos, me impide, sin embargo, decir las cosas como las siento. Pero me obliga a pensar…y me hurga en los adentros…y desgarra el corazón…y golpea mi cerebro…tratándome de cobarde porque he llorado en silencio…
¿Por qué me siento tan mal, tan confusa y asustada? ¿Por qué comienzo a notar sus quejidos tan lejanos?
Me angustia la idea de pensar en la muerte llevándose su cuerpo sin respetar su mente, que aún se resiste al paso del tiempo…y asustada le preguntará al alma si ya se acerca el momento…Y si de pronto despierta sobresaltado, y entre jadeos pregunta si ya es la hora, si es que tan pronto llegó el momento, quisiera ser la mano que lo acaricie con gran consuelo, y la voz que le diga al oído “tranquilo, abuelo, sigue durmiendo”.
No puedo dormir, madre, porque esta noche tocan a muerto
No puedo dormir, madre, porque esta noche tocan a muerto… porque llega la hora de volver a llorar por alguien de los nuestros.
La negra dama vuelve, como siempre, en silencio…sumida entre las sombras, escondida en negros velos… vuelve para darnos una lección de humildad y hacernos tragar nuestra soberbia, recordándonos así su poder y la grandeza de su reino.
Afloran ahora, madre, mis sentimientos, con la complicidad de la noche… y mientras busco razones que me convenzan, se evade mi pensamiento a buscar su blanco pelo… su castigado cuerpo… sus ojos que son culpables de querer seguir viviendo. Y es ahora cuando pienso: a qué le temen los presos horas antes de que suenen los tambores en el pueblo, si saben que su partida ya es un hecho sin remedio?
Se lo lleva la muerte, quizá porque no siga sufriendo…por no verlo de puerta en puerta tras de cariño, como los perros…Y es que bien sabes, madre, que no hay culpables, sólo silencio… cuando la muerte llega tan sólo pide tener respeto.
¿No te das cuenta, madre, de que esta noche tocan a muerto?
Ahora es cuando me pesa el haber perdido el tiempo…el no haber sido yo misma…el escudarme en los miedos y dejar que, poco a poco, se escapara el tren que quiero…
La noche, siempre propicia para abrir el baúl de los sentimientos, me impide, sin embargo, decir las cosas como las siento. Pero me obliga a pensar…y me hurga en los adentros…y desgarra el corazón…y golpea mi cerebro…tratándome de cobarde porque he llorado en silencio…
¿Por qué me siento tan mal, tan confusa y asustada? ¿Por qué comienzo a notar sus quejidos tan lejanos?
Me angustia la idea de pensar en la muerte llevándose su cuerpo sin respetar su mente, que aún se resiste al paso del tiempo…y asustada le preguntará al alma si ya se acerca el momento…Y si de pronto despierta sobresaltado, y entre jadeos pregunta si ya es la hora, si es que tan pronto llegó el momento, quisiera ser la mano que lo acaricie con gran consuelo, y la voz que le diga al oído “tranquilo, abuelo, sigue durmiendo”.
No puedo dormir, madre, porque esta noche tocan a muerto
Seguramente no tengo ningún derecho a poner esto...Lo escribí hace diez años cuando perdí a mi abuela...es la primera vez que ve la luz...
Si peco de atrevida por colgarlo aquí y en este momento, pido perdón...no quiero ofender a nadie...Se trata sólo de mi pequeño homenaje a Don RAFAEL, porque sé que ha sido él quien inventó "el precio justo" y tantas otras cosas que han llegado a mis oídos...
Va por él...
<<...Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar...>>
Odio madrugar!! y el ruido machacante del despertador metiéndose en el oído...Y dar mil vueltas por casa, aún medio zombi, olvidando qué iba a hacer...
Odio salir a la calle y que empiece a llover...y más si las gotas son gordas y están frías...y que mis pelos se mojen y tomen una forma y volumen distinto al esculpido y modelado en casa (quizá hasta quedo más peinada...en fin)...
Odio quedarme entre un grupillo de madres y sentirme rara y ajena a sus mundos, fuera de lugar...sus comentarios sobre lo que lloran sus niños y la pena que les da dejarlos así...como si se fueran a traumatizar (los niños...aunque las que se traumatizan son ellas)...y que se cuenten su planning del día: limpiar, cocinar, hacer la compra...Pero odio más, si cabe, que digan que no quieren/pueden trabajar...y que me miren raro cuando yo digo que los niños crecen y luego una se queda sola y sin nada que hacer...y odio muchísimo más mis incesantes ganas de que se disuelva el grupo para escaparme de entre tanta mujer florero que jamás entenderé...
Odio adelantar la hora de mi primer café del día y pasarme tres horas muertas esperando...o, como en este caso, odiando todo lo que odio mientras remuevo el café con la cucharilla a la vez que escribo esto...
Odio, simplemente odiar... y más a estas horas de la mañana...
Odio salir a la calle y que empiece a llover...y más si las gotas son gordas y están frías...y que mis pelos se mojen y tomen una forma y volumen distinto al esculpido y modelado en casa (quizá hasta quedo más peinada...en fin)...
Odio quedarme entre un grupillo de madres y sentirme rara y ajena a sus mundos, fuera de lugar...sus comentarios sobre lo que lloran sus niños y la pena que les da dejarlos así...como si se fueran a traumatizar (los niños...aunque las que se traumatizan son ellas)...y que se cuenten su planning del día: limpiar, cocinar, hacer la compra...Pero odio más, si cabe, que digan que no quieren/pueden trabajar...y que me miren raro cuando yo digo que los niños crecen y luego una se queda sola y sin nada que hacer...y odio muchísimo más mis incesantes ganas de que se disuelva el grupo para escaparme de entre tanta mujer florero que jamás entenderé...
Odio adelantar la hora de mi primer café del día y pasarme tres horas muertas esperando...o, como en este caso, odiando todo lo que odio mientras remuevo el café con la cucharilla a la vez que escribo esto...
Odio, simplemente odiar... y más a estas horas de la mañana...
Y ahí estamos de pie los dos semidesnudos
con las manos de arena
y afuera el mundo.
Yo me callo, te escucho y afirmo que
mis labios rodarán
por ti esta noche.
Y ahí están tus ojos,
se clavan como espadas
afiladas en mi carne.
Yo soy piel dolorida que se quebranta,
luz que desafina todos tus planes.
Sabes, amor, las distancias las mido a oscuras
entre mis manos que se amarran a tus caderas,
entre tu boca y la serpiente que me acecha,
entre la playa que se vacía en marea.
Quieta, quieta...
que me vacío sobre tu espalda,
que colonizo todos los montes de tu mapa.
Quieta,
que me agazapo en tu cintura,
mis manos te recorren y así me atrapas.
Así que amor no demores la impaciencia,
que soy esclavo hambriento de tu aliento.
(Fran Fdez)
[...vamos a acabar destrozándonos...]